-RECEPCIÓN ARTÍSTICA
La forma de valorar la obra de arte, está fuertemente
determinada por la actitud de los diversos receptores o intérpretes, que según
los tiempos
Formas de interacción:
Recorridas espacialmente (Arquitectura)
Tocadas (Escultura)
Observadas minuciosamente, acercándonos o alejándonos
visualmente (Pintura) o moviéndonos en el antes o después
Escuchada (Música), audición es el proceso mediante el cual
captamos, elaboramos e interiorizamos los estímulos sonoros
-APRECIACIÓN ARTÍSTICA
La
apreciación artística se concibe como un proceso en el que están implicados una
obra única y original con ciertos atributos y diferentes tipos de espectadores
en busca de valoraciones, experiencias significativas y sentidos.
Una
perspectiva más profunda del fenómeno de la apreciación del arte, nos lleva a
considerar que tanto la obra artística como los espectadores o público, están
inmersos en una cultura que condiciona los modos de expresión y apreciación de
las artes.
Producto artístico =
Obra de arte
El hombre por medio del producto artístico satisface sus
necesidades estéticas de conocimiento, manifiesta su ideología y su visión de
la realidad. El producto artístico permite objetivar el vínculo existente entre
su personalidad, la estructura cultural de la época y el entorno que le rodea.
PLANOS O NIVELES
COMUNICATIVOS EN EL ARTE
Podemos distinguir tres planos comunicativos que tiene todo
mensaje, sin olvidar que alguno de ellos predomina sobre los otros dos.
·
El semántico: implica detectar el parecido o no de la misma imagen con la
realidad. Este plano es el de las semejanzas entre la figura y la realidad que
ella representa.
Liebre,
Alberto Durero,
1502
Dibujo, Retrato de la Madre, Alberto Durero, 1502
·
El sintáctico: en la obra predomina la composición u organización armónica de
sus componentes. Aquí interesan las relaciones entre figuras.
Gallo, Pablo Picasso, Cubismo, 1938
Instalación, Retrato de
Mae West, Salvador Dalí, 1936
Museo Dali
·
El pragmático: la obra acentúa los efectos de ella sobre el receptor, logra
afectar, asombrar o escandalizar. Aquí se trata de las relaciones de las
figuras con el receptor.
Sin título, Félix
González Torres
Artista nacido en Cuba en
1957, residente en Nueva York desde finales de la década del 70, y muerto de
sida en Miami a principios de 1996.
La intención de crear una obra perdurable e inagotable, cuya
producción continúa después de su muerte. Son caramelos envueltos en papel
metalizado que el espectador puede comer o llevarse. Los caramelos configuran
una obra que se desmaterializa literalmente en la boca –algo que además
obstaculiza la posibilidad de comercializarla–, y que finalmente acaba
propiciando una “dulce” y activa relación con el espectador. “Necesito al
espectador, necesito la interacción –expresaba
el artista–. Sin
el público estas obras no son nada, nada. Pido a la gente que me ayude, que
asuma la responsabilidad, que se vuelva parte de mi trabajo” Los espectadores
se adueñan de una parte de la obra, y es una parte que se entiende como muy
importante.
Escultura de barro, Bart,
Nadin Ospina
De forma paródica, las esculturas de Nadín Ospina aluden al
exotismo que tanto ensalza el capitalismo tardío: el de una alteridad domesticada, que lejos de provocar
temor, llega a causar cierta admiración.
Es un exotismo deseable, despojado de su esencia, y que no pone en cuestión la
preeminencia del capitalismo y su ideología. Es una alteridad que no genera conflictos, en la que
todos ya seamos morenos, negros o amarillos, nos parecemos enormemente a Bart
Simpson.